Errores comunes de las startups: 6 fallos que debes evitar

Errores comunes de las startups, ¿qué patrones siguen las startups que han fracasado?

Según la edición Nacional de Business Angels de 2017, el ecosistema de startups español ya cuenta con más de 3.301 empresas registradas.

Comenzar una startup puede parecer una tarea sencilla y es común escuchar hablar de grandes éxitos de emprendedores. Sin embargo, según datos del medio digital Business Insider el 90% de las startups no consiguen triunfar pero…

¿Cuáles son los patrones de lo que no hay que hacer a la hora de emprender? ¡Te los contamos!

Los 6 errores más comunes que hacen que una startup fracase

Competencia, dificultad para conseguir financiación o no contar con estrategias claras son algunos de los problemas a los que las startups tienen que enfrentarse durante su creación y a lo largo de su vida.

Estamos constantemente escuchando casos de éxito de empresas que han triunfado en poco tiempo. Historias de jóvenes emprendedores que han conseguido llevar sus proyectos a lo más alto son noticia. Sin embargo, debes tener en cuenta que por cada empresa unicornio o startup de éxito, existen incontables startups que han fracasado.

Concretamente, según iProUp, 9 de cada 10 compañías que se crean terminan desapareciendo en sus primeros años de vida.

Es por esto, que hemos recopilado los 6 fallos más comunes que hacen que las startups fracasen.

¿Quieres descubrir qué no hay que hacer a la hora de emprender en un nuevo negocio? ¡Sigue leyendo!

1. No contar con un equipo especializado 

Uno de los errores comunes que hacen fracasar a las startups es el equipo o la organización de estos.

Son muchos los fundadores de startups que inician un negocio solos o con socios que no tienen los conocimientos suficientes sobre diferentes áreas. Por ejemplo, socios con conocimientos empresariales, pero que no saben cómo vender o comunicar una idea.

Por esto, es imprescindible contar con equipo especializado y comprometido. ¿Cuáles son algunos de los errores que pueden suceder dentro de un equipo?

  • Falta de diversidad en los miembros del equipo.
  • Socios que no se complementen.
  • Conflictos internos entre miembros del equipo.
  • Que no exista un líder claro.
  • Que no haya confianza entre el equipo y los fundadores.

Por ejemplo, el propio creador de Tekstum, una empresa que ofrecía soluciones Big Data para el sector editorial, declaró que la falta de diversidad dentro de su equipo fue uno de los fallos principales que les llevaron a fracasar.

Algo parecido fue lo que sucedió con la compañía Noucer. Como recoge el portal Marketing 4 Ecommerce, la falta de un socio en las decisiones comerciales y tecnológicas hizo fracasar a la empresa.

2. No analizar a la competencia, un error muy común de las startups

Ignorar a la competencia es una de las principales causas del fracaso en una startup por varias razones:

  • Debes conocer el mercado y el sector en el que quieres introducirte: qué hace la competencia, cómo trabajan, cómo responden los clientes, etc.
  • Aunque seas una empresa nueva, siempre pueden surgir competidores y en ocasiones, puede que tengan más recursos. De hecho, si es un mercado nuevo, es muy probable que surjan nuevos competidores interesados en obtener beneficio.
  • Tienes que estudiar a la competencia antes de lanzar tu startup, pero también una vez que la hayas lanzado.

Uno de los casos más sonados de fracaso frente a la competencia fue el de la red social Tuenti. En 2009, Tuenti era el tercer sitio con mayores búsquedas en todo el mundo y en 2010 la red social más utilizada en España.

Sin embargo, Facebook contaba con más recursos tanto económicos como técnicos y Tuenti terminó vendiendo su startup a Telefónica.

Otro caso de fracaso fue el de Jinn, que intentó introducirse en un mercado competitivo y que contaba ya con grandes empresas como Deliveroo, Uber Eats o Glovo.

Si escuchas la frase “Claro que sí, guapi” seguro que sabes que hablamos de la famosa startup de compra y venta de ropa de segunda mano, Chicfy. Tras un sonado éxito, terminó vendiendo su compañía a Vinted que se introdujo en el mercado en España con unos precios muy competitivos.

3. No resolver una necesidad de mercado

Puede parecer una obviedad, pero no analizar las necesidades de mercado y de los clientes potenciales, ha sido la razón de fracaso del 42% de las startups.

Puedes pensar que tienes un gran producto y una gran idea, sin embargo, si no existe una necesidad real que demanden los usuarios, lo más probable es que ese producto no triunfe.

Para evitarlo, debes analizar el mercado, a los posibles clientes potenciales y a la competencia.

En definitiva, escuchar a quién realmente te interesa: el cliente.

4. Gestionar mal la financiación 

Otro de los errores comunes de las startups es no gestionar bien el capital. En este punto, puede haber dos opciones:

  • Que no exista financiación suficiente.

Tuenti o Doppler Labs han sido dos de las startups que han sufrido este problema. El primero, por enfrentarse a un competidor como Facebook que contaba con muchos más recursos económicos y el segundo, por no contar con la financiación suficiente para continuar con el negocio.

Otro caso que hay que destacar, fue el de Take Eat Easy. En pleno auge de las compañías de comida a domicilio, esta startup española consiguió tanto éxito que no tuvo suficiente financiación para gestionar la alta demanda de pedidos.

  • Que consigas demasiado dinero, pero no sepas gestionarlo.

A pesar de que pueda parecer sorprendente, hay ocasiones en las que conseguir demasiado capital puede ser un problema si no sabes gestionarlo y no cuentas con un buen plan de inversión.

Volviendo al ejemplo de Chicfy, esta pareja de emprendedores, ya intentaron introducirse en el mundo de la hostelería. La falta de experiencia en el sector y la crisis, hicieron que tardasen 16 años en saldar las deudas de ese negocio.

Si quieres conocer cómo funcionan las rondas de financiación y más importante aún, qué 4 consejos son clave para conseguirlas, no te pierdas este post.

5. No tener un plan de marketing y comunicación

Si hay algo en lo que las empresas deben invertir actualmente es en su estrategia digital. Es importante conocer a tu público objetivo, sí, pero también es imprescindible conocer dónde se encuentra y cómo debes dirigirte a él.

El fallo en muchas de las startups se encuentra en no saber comunicar su producto y conseguir captar la atención de los clientes potenciales para convertirlos en clientes reales.

Para ello, es necesario definir una estrategia de marketing digital, estrategia de SEO y SEO local y comunicación.

Casos como Tuenti o Chicfy pueden clasificarse dentro de este punto que no supieron responder a las necesidades de ese momento de sus clientes mientras la competencia, sí.

6. No elegir el momento adecuado para lanzar el producto

El momento para lanzar un producto o servicio es importante. De hecho muchas empresas quieren perfeccionar y actualizar tanto su producto que finalmente terminan perdiendo la oportunidad de mercado.

Para ello, es importante utilizar un MVP (mínimo producto viable) con el que ofrecer la experiencia a los clientes utilizando la menor cantidad de tiempo y recursos posibles. De esta forma, sabemos si nuestro proyecto puede o no funcionar.

De la misma manera, también hay casos en los que el fracaso se produce por lanzar una startup demasiado pronto. Este fue el caso de la empresa mencionada en el primer punto, Teksum.

Según palabras recogidas en La Vanguardia por uno de uno de sus fundadores, “El mundo editorial no estaba preparado, en general, es un sector poco tecnológico. No encontramos suficientes clientes y las cuentas no salieron”

Los fracasos de startups más famosos de la historia

Theranos

Si hay un caso que todo el mundo conoce y que dio mucho que hablar dentro del ecosistema de las startups fue el de Theranos.

Fue una de las grandes promesas de Silicon Valley y es que ofrecía a oportunidad de analizar una gran cantidad de patologías con una sola gota de sangre. ¿Qué paso?

Consiguió  millones de dólares en financiación hasta que The Wall Street Journal publicó un artículo destapando su estafa.

Juicero

¿Un exprimidor que cuesta 700 dólares?

Esta empresa consiguió levantar más de 100 millones de dólares en financiación para su exprimidor de zumos con conexión wifi. A pesar de que pueda parecer que el fallo fue el desorbitado precio, muchos clientes lo compraron. La empresa empezó su crisis cuando se demostró que las bolsas de fruta que vendían podían ser exprimidas sin necesidad de la máquina.

Beepi

Antes hemos mencionado, que uno de los patrones de fracaso de las startups es la financiación mal gestionada y este fue el caso de Beepi.

Una startup dedicada a la compraventa de coches de segunda mano que llegó a estar valorada en más de 450 millones de euros. Debido a una mala gestión, la empresa se quedó sin dinero y tuvo que cerrar. Más tarde se supo que sus fundadores llegaron a gastar 6 millones de euros mensuales en diferentes excentricidades.

Yik Yak

Una startup que pretendía ser el nuevo WhatsApp fracasó debido al mal uso por parte de alguno de los usuarios de su aplicación.

Desde Yik Yak podías enviar mensajes anónimos a otros usuarios de la red social por lo que la compañía se vio vinculada con acusaciones de racismo y acoso.

Un claro ejemplo que demuestra que además de vender tu producto, tienes que proteger y defender la privacidad y los datos de tus clientes.

En definitiva, es importante tener una buena idea, pero es aún más importante saber venderla, gestionarla y ofrecerla a los clientes. Si quieres evitar estos patrones que hacen que las startups fracasen, crea un buen plan y estrategia y ten todos estos factores en cuenta.